Por fin el Cabildo Catedralicio y el Ayuntamiento han llegado a un acuerdo para empezar a ofertar las visitas nocturnas a nuestro principal (pero no único) edificio monumental.
Según la noticia publicada en El Día de Córdoba, "el proyecto mejorará la oferta turística de la ciudad, permitirá un mayor conocimiento de uno de los monumentos más emblemáticos y conocidos del mundo y reforzará la candidatura de Córdoba a la Capitalidad Cultural Europea de 2016"
Está previsto que buena parte de las entradas se vendan por internet y por los touroperadores. La previsión es que sólo entre un 10 y un 15% se expendan en taquilla a un precio que oscila entre los 12 y los 18 euros, en función de los distintos escenarios que se han previsto en cuanto a ocupación media y resultados económicos derivados.
Aunque el número de plazas disponibles al año rondarán las 30.000 plazas, lo que frente a los 1,2 millones de visitantes anuales que recibe la mezquita es una minucia, si es cierto que puede tener un efecto sobre la economía local mucho mayor ya que prolongará la estancia de tanto las personas que asistan a la visita como de otros acompañantes que no lleguen a entrar al monumento.
También será interesante por cuanto sienta un precedente a la hora de aperturas nocturnas.
Sobre todo en monumentos tan imponentes como el Alcázar de los Reyes Cristianos, la Torre de la Calahorra o el Templo Romano de Claudio Marcelo (una vez lo rehabiliten y hagan visitable).
Una actividad nocturna donde un grupo de actores representase un pequeño acto relacionado con alguno de los personajes ilustres que pasearon y habitaron dichos recintos, no solo serviría para dar trabajo a titulados de nuestra escuela superior de arte dramático, sino que haría de la noche cordobesa un evento cultural por si misma.
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